Reseña biografica
Poeta francés nacido en Liré, Anjou, en 1522.
Inició estudios de Derecho en Poitiers, donde a los veintiún años de
edad, trabó amistad con Ronsard y Paletier du Mans,
trasladándose luego a Paris para terminar su carrera en Le Collège
Coqueret . Formó parte del grupo La Pléyade, movimiento que
le inspiró su manifiesto para defender la lengua francesa, y las
primeras recopilaciones poeticas publicadas en 1549 bajo los nombres
"El Olivo" y "Versos líricos".
Entre 1553 y 1557 trabajó en Roma como secretario del cardenal
Jean du Bellay. Hastiado por el ambiente corrupto romano, regresó a
Paris dedicándose por completo al ejercicio literario, con
producciones tan importantes como "El Poeta cortesano" en
1559, y "Sonetos a la reina de Navarra" .
Falleció repentinamente en enero de 1560.
©
Sonetos de Joachim du
Bellay:
Andar
con aire grave y con grave entrecejo...
Esos cabellos
de oro los lazos son, Señora...
Feliz
quien tras la muerte se le sigue la gloria...
¡Hermosos cabellos plateados, dulcemente revueltos!...
Los que
están enamorados, cantarán sus amores...
No escribo ya
de amor, no estando enamorado...
No pienses,
Robertet, que esta Roma de ahora...
No quiero
escudriñar de la natura el fondo...
Andar con
aire grave y con grave entrecejo...
Andar con aire grave y
con grave entrecejo,
y con sonrisa grave a todos dar contento,
sopesar las palabras, responder con los gestos,
con un Messer non, o bien un Messer si:
Entremezclar frecuente un breve El cosi,
y con un son Servilore imitar al honesto,
y como quien parte tuvo en la conquista,
de Florencia y de Nápoles ufano discurrir:
Señorear a todos con claro besamanos,
y siguiendo el ejemplo del patricio romano,
ocultar la pobreza con gallardo exterior:
He aquí de esta corte las virtudes más altas.
Así es que enfermo, pobre, y en muy mala montura,
hasta Francia regresas afeitado y sin blanca.
De "Les Regrets"
1558
Visor 1985
Versión de Luis Antonio de Villena
Esos
cabellos de oro los lazos son, Señora...
Esos cabellos de oro los lazos son, Señora,
en los que fue al principio mi libertad tenida;
amor prendió su llama por todo el corazón,
y esos ojos fueron el rayo que atravesó mi vida.
Fuertes los nudos son, la llama áspera y viva,
la saeta, de mano a tirar aguerrida,
y con todo, amo, adoro y quiero
a la que me estrecha, me quema y lastima.
Para romper entonces, apagar o curar
el duro lazo, el ardor o la herida,
no quiero hierro, licor ni medicina:
La dicha y el placer que en sucumbir recibo
de tal mano, no permiten que intente
ni cortante puñal, ni frialdad, ni pítima.
De "L'Olive" 1549
Visor 1985
Versión de Luis Antonio de Villena
Feliz
quien tras la muerte se le sigue la gloria...
Feliz quien tras la
muerte se le sigue la gloria,
y aún muy más feliz si la inmortalidad
para él no principia con la posteridad
sino que antes de la muerte ya fascina su alma.
Tú gozas, Ronsard mío, incluso ahora en vida,
del inmortal honor que mucho has merecido:
y aun antes de morir (felicidad bien rara)
tu muy feliz virtud triunfa de las envidias.
Ánimo pues, Ronsard, que la victoria es tuya,
y de tu lado tienes el favor de tu rey:
De victorioso laurel ya coronan tus sienes,
y ya la espesa turba alrededor de ti
semeja a esos espíritus que en el ínfero un día
rodearon al tracio sacerdote de gran sobrepelliz.
Nota del traductor:
Soneto obviamente dedicado a la gloria de Ronsard. Pierre de
Ronsard (1524-1585), dos años menor que Du Bellay, fue en seguida
considerado como jefe de fila de "La Pléiade".
De "Les Regrets"
1558
Visor 1985
Versión de Luis Antonio de Villena
¡Hermosos cabellos plateados, dulcemente revueltos!...
¡Hermosos cabellos
plateados, dulcemente revueltos!
¡Frente serena y rizada! ¡Y tú, faz toda de oro!
¡Ojos de cristal hermosos! ¡Grande boca honorada,
que con ancho repliegue levantas tus extremos!
¡Lindos dientes de ébano! ¡Oh tesoros preciosos,
que con sonreír solo enamoráis al alma!
¡Damasquina garganta con cien pliegues ornada!
¡Y vosotros pezones, dignos de tan gran cuerpo!
¡Bellas uñas doradas! ¡Mano rolliza y breve!¡
¡Oh muslo delicado! ¡Y vos, redondas piernas!
¡Y eso que honestamente a nombrar ni me atrevo!
¡Bello y transparente cuerpo! ¡Miembros de vidrio bello!
¡Oh, beldades divinas! Perdonadme, os lo ruego,
si, pues que soy mortal, a amaros no me atrevo.
De "Les Regrets"
1558
Visor 1985
Versión de Luis Antonio de Villena
Nota del traductor:
Soneto paródico. Du Bellay distorsiona e invierte el tono y los topoi
habituales en la poesia petrarquista. En esto (que llevaron más lejos
Quevedo o Lope de Vega, por ejemplo) Du Bellay es barroco o mejor
-por su modo- manierista. Ciertas distorsiones de la amada petrarquista
la recuerdan, en pintura, a los retratos-bodegones de Giuseppe
Arcimboldo,
contemporáneo de nuestro autor.
Los que
están enamorados, cantarán sus amores...
Los que están
enamorados, cantarán sus amores,
los que buscan honor, cantarán de la gloria,
los que están junto al Rey dirán de su victoria,
los que son cortesanos ensalzarán favores:
Los que gustan de artes, hablarán de sus ciencias,
los que son virtuosos se harán tomar por tales,
los que frecuentan vino, parlotearán de vinos,
los que viven en ocio, escribirán las fábulas,
los que son maldicientes irán a maldecir ,
los menos enojosos hablarán de reír ,
los que son más valientes pregonarán hazañas,
y los que se estiman mucho cantarán su alabanza,
los que sin tino adulan harán Angel al diablo:
Yo que soy desgraciado, lloraré en mi desgracia.
De "Les Regrets"
1558
Visor 1985
Versión de Luis Antonio de Villena
No escribo ya de amor, no estando
enamorado...
No escribo ya de amor,
no estando enamorado,
no escribo de belleza, pues yo no tengo amada,
no escribo de dulzor, gustando la rudeza,
no escribo de placer, hallándome en dolores:
no escribo de la dicha, pues que soy desgraciado,
no escribo de favor, no viendo a mi princesa,
no escribo de tesoros, no teniendo riquezas,
no escribo de salud, siendo ya melancólico:
no escribo de la Corte, tan lejos de mi príncipe,
no escribo de Francia, en ajena provincia,
no escribo del honor, pues que aquí no lo encuentro:
no escribo de amistad, hallando fingimiento,
no escribo de virtud, si tampoco la veo,
no escribo de saber, entre gentes de Iglesia.
De "Les Regrets"
1558
Visor 1985
Versión de Luis Antonio de Villena
No
pienses, Robertet, que esta Roma de ahora...
Florimond Robertet, Barón de Alluye.
Cortesano francés, amigo de Do Bellay y de Ronsard.
Se sabe que estuvo en Roma -al menos- en 1555.
No pienses, Robertet,
que esta Roma de ahora
es aquella otra Roma que te placía tanto.
No dan crédito ya, como solían darlo,
ni se hace ya el amor como entonces se hacía.
Ni paz ni bonanza gobiernan ya aquí,
la música y la danza han debido pararse,
corrompido está el aire, y es Marte quien manda,
la turbación, la pena y el hambre cada día.
El corrompido artesano ha cerrado su tienda,
el ocioso abogado abandonó el oficio,
y el pobre mercader lleva solo talega:
No ves sino soldados, morrión a la cabeza,
sólo tambores oyes o parejo estruendo,
y Roma cada día espera otro saqueo.
De "Les Regrets"
1558
Visor 1985
Versión de Luis Antonio de Villena
No quiero
escudriñar de la natura el fondo...
No quiero escudriñar de la natura el fondo,
no quiero rebuscar la esencia universal,
no quiero sondear los abismos cubiertos,
ni dibujar del cielo la hermosa arquitectura.
No pinto yo mis lienzos con tan rica pintura,
y argumentos tan altos no los busco en mis versos:
Mas del lugar siguiendo los accidentes varios,
sea del bien o del mal, escribo a la ventura.
A mis versos les lloro, si tengo una tristeza:
y me río con ellos y les cuento el secreto,
pues son del corazón muy fieles secretarios.
Así es que no pretendo peinarlos o adornarlos,
ni con sonoros nombres los quiero disfrazar
sino de notas íntimas o propios comentarios.
De "Les Antiquités
de Rome" 1558
Visor 1985
Versión de Luis Antonio de Villena